Tokio Hotel y la música clásica
En la época contemporánea, es difÃcil de encontrar semejanzas de música clásica. [La música clásica] Se identifica como algo que le pertenece al pasado... algo del pasado perfecto, que ya no afecta más en estos dÃas, que ya no tiene ningún efecto. Pero, Tokio Hotel, ha logrado traerla de vuelta a la vida... o más bien, darle vida nuevamente.
Fueron cuatro colaboraciones especiales con la industria, lo que contribuyó a la fusión de dos géneros, que reflejan que juntos pueden realmente explotar... las diferencias, si se compensan.
La música clásica es la perfección, el máximo nivel que las notas y el amor por la música pueden alcanzar... pero la orquesta carece de una voz, que acompañe aquella música. La música es el camino, la voz moderna es [la que pasa] a través de... una voz versátil que puede adaptarse a cualquier papel, que parece vestirse de los acordes, de violines, y de pianos, [para crear] aquellas misteriosas partituras.La música de Tokio Hotel, moderna, cualificada, pero sin embargo a menudo subestimada, parece ser enterrada bajo los impresionantes instrumentos, que son capaces de producir una música ligera y potente... pero el elemento, pasa al parataxis, de la subordinación a la coordinación, y a la voz de Bill. La música en sà no sólo es un anexo, sino una misma parte como algo innato y no añadido; a la complejidad, combinada con la sencillez, [siendo esta la] cadena invisible: el amor, sin el cual nadie puede nacer, crecer, [y] desarrollarse, siendo el amor quien adquiere [conquista] la inmortalidad.
La primera colaboración en particular fue en 2005, durante un evento gratuito, donde Tokio Hotel, seguido por una orquesta, tocaron [en conjunto] Durch Den Monsun y Schrei.
La primera canción, dio el inicio a todo, resulta imaginario, como el tema más apropiado para una interpretación orquestal [resulto ser Durch Den Monsun]: como si la música clásica era quien guiaba la lluvia del monzón... la música clásica combinó a la perfección el rock de Tokio Hotel, sin dominar, [con] un tranquilo acompañamiento... que le dio mayor fuerza a la música original; la segunda canción, Schrei, sin embargo, fue más potente, adaptándose [la orquesta] de acuerdo a su régimen [CNTH: se refiere a que la orquesta se adapto a la melodÃa de la canción]: dando inicio con fuertes melodÃas de trompeta, para luego continuar con los acordes... en lugar de triturar [las cuerdas] de la guitarra y el bajo, dejando a un lado los amplificadores para las notas [escalas].
Una música bien estudiada, puede resultar una aparente improvisación... una música con aparente rigidez, trabajada [y] directa, de hecho, puede penetrar en el alma, resonando e implicando [todo a su paso], [haciendo que] los vociferados gritos de Bill, mientras las llamas se alzaban, al punto de su presentación... pusieran a vibrar a la audiencia.
En la primera y segunda colaboración, hubo una alternancia entre las tonalidades lentas y rápidas... con la tercera, sin embargo, en la canción Spring Nicht, puede decirse que alcanzaron su punto máximo, gracias también al texto introspectivo y a la vez directo de la canción, contra el suicidio y de cómo una mano te coge [para que no caigas] al suelo...
El espectáculo se llevó a cabo el 05 de marzo de 2007 durante la ceremonia alemana de los premios Comet, los cuales fueron transmitidos por el canal de música alemana VIVA: La orquesta siguió la lÃnea melódica de la primera canción, originando una sinfonÃa... tranquila, casi opaca... como el tema de la canción [Spring Nicht], arcos , violines, marcaban el ritmo de la canción, sin ninguna variación, casi como el viento que sacudÃa el cabello del cantante, los únicos elementos que se movieron de su cuerpo frÃo, rÃgido... murieron antes de saltar al vacÃo. Pero la música sostuvo a Bill, al momento de lanzarse, como manos escapando del tártaro por haberse negado su acceso... al no ser digno de ese lugar; los instrumentos de la banda se sienten del mismo modo, como cuando producen aquella sinfonÃa...
La cuarta colaboración, que se esperaba sin embargo, no fue aquella finalmente, sino la que se realizo, directamente desde Italia: de hecho, fue la presentación en vivo de World Behind My Wall en el Festival de Sanremo, acompañada por la orquesta del maestro Morini.
A pesar de su aspecto mundano la banda mostro durante las pruebas, a juzgar objetivamente que no se puede considerar ese como su mejor rendimiento: [por los] problemas al mezclar, la instrumentación. Pero la voz de Bill, y los instrumentos de Tokio Hotel, fueron capaces de maniobrar a pesar de las dificultades, y demostrar su altitud ante la ocasión: los papeles se invirtieron, su música fue quien le dio contenido a la orquesta, guiándola, como revistiéndola a un papel importante, logrando [ésta] adaptarse de forma adecuada, y demostrar su capacidad; ayudada también por la música original, poco a poco [se fueron] soltando, donde, tomaron ventaja de una estructura simple musicalmente y métricamente, siendo ésta de gran ayuda
En la época contemporánea, es difÃcil de encontrar semejanzas de música clásica. [La música clásica] Se identifica como algo que le pertenece al pasado... algo del pasado perfecto, que ya no afecta más en estos dÃas, que ya no tiene ningún efecto. Pero, Tokio Hotel, ha logrado traerla de vuelta a la vida... o más bien, darle vida nuevamente.
Fueron cuatro colaboraciones especiales con la industria, lo que contribuyó a la fusión de dos géneros, que reflejan que juntos pueden realmente explotar... las diferencias, si se compensan.
La música clásica es la perfección, el máximo nivel que las notas y el amor por la música pueden alcanzar... pero la orquesta carece de una voz, que acompañe aquella música. La música es el camino, la voz moderna es [la que pasa] a través de... una voz versátil que puede adaptarse a cualquier papel, que parece vestirse de los acordes, de violines, y de pianos, [para crear] aquellas misteriosas partituras.La música de Tokio Hotel, moderna, cualificada, pero sin embargo a menudo subestimada, parece ser enterrada bajo los impresionantes instrumentos, que son capaces de producir una música ligera y potente... pero el elemento, pasa al parataxis, de la subordinación a la coordinación, y a la voz de Bill. La música en sà no sólo es un anexo, sino una misma parte como algo innato y no añadido; a la complejidad, combinada con la sencillez, [siendo esta la] cadena invisible: el amor, sin el cual nadie puede nacer, crecer, [y] desarrollarse, siendo el amor quien adquiere [conquista] la inmortalidad.
La primera colaboración en particular fue en 2005, durante un evento gratuito, donde Tokio Hotel, seguido por una orquesta, tocaron [en conjunto] Durch Den Monsun y Schrei.
La primera canción, dio el inicio a todo, resulta imaginario, como el tema más apropiado para una interpretación orquestal [resulto ser Durch Den Monsun]: como si la música clásica era quien guiaba la lluvia del monzón... la música clásica combinó a la perfección el rock de Tokio Hotel, sin dominar, [con] un tranquilo acompañamiento... que le dio mayor fuerza a la música original; la segunda canción, Schrei, sin embargo, fue más potente, adaptándose [la orquesta] de acuerdo a su régimen [CNTH: se refiere a que la orquesta se adapto a la melodÃa de la canción]: dando inicio con fuertes melodÃas de trompeta, para luego continuar con los acordes... en lugar de triturar [las cuerdas] de la guitarra y el bajo, dejando a un lado los amplificadores para las notas [escalas].
Una música bien estudiada, puede resultar una aparente improvisación... una música con aparente rigidez, trabajada [y] directa, de hecho, puede penetrar en el alma, resonando e implicando [todo a su paso], [haciendo que] los vociferados gritos de Bill, mientras las llamas se alzaban, al punto de su presentación... pusieran a vibrar a la audiencia.
En la primera y segunda colaboración, hubo una alternancia entre las tonalidades lentas y rápidas... con la tercera, sin embargo, en la canción Spring Nicht, puede decirse que alcanzaron su punto máximo, gracias también al texto introspectivo y a la vez directo de la canción, contra el suicidio y de cómo una mano te coge [para que no caigas] al suelo...
El espectáculo se llevó a cabo el 05 de marzo de 2007 durante la ceremonia alemana de los premios Comet, los cuales fueron transmitidos por el canal de música alemana VIVA: La orquesta siguió la lÃnea melódica de la primera canción, originando una sinfonÃa... tranquila, casi opaca... como el tema de la canción [Spring Nicht], arcos , violines, marcaban el ritmo de la canción, sin ninguna variación, casi como el viento que sacudÃa el cabello del cantante, los únicos elementos que se movieron de su cuerpo frÃo, rÃgido... murieron antes de saltar al vacÃo. Pero la música sostuvo a Bill, al momento de lanzarse, como manos escapando del tártaro por haberse negado su acceso... al no ser digno de ese lugar; los instrumentos de la banda se sienten del mismo modo, como cuando producen aquella sinfonÃa...
La cuarta colaboración, que se esperaba sin embargo, no fue aquella finalmente, sino la que se realizo, directamente desde Italia: de hecho, fue la presentación en vivo de World Behind My Wall en el Festival de Sanremo, acompañada por la orquesta del maestro Morini.
A pesar de su aspecto mundano la banda mostro durante las pruebas, a juzgar objetivamente que no se puede considerar ese como su mejor rendimiento: [por los] problemas al mezclar, la instrumentación. Pero la voz de Bill, y los instrumentos de Tokio Hotel, fueron capaces de maniobrar a pesar de las dificultades, y demostrar su altitud ante la ocasión: los papeles se invirtieron, su música fue quien le dio contenido a la orquesta, guiándola, como revistiéndola a un papel importante, logrando [ésta] adaptarse de forma adecuada, y demostrar su capacidad; ayudada también por la música original, poco a poco [se fueron] soltando, donde, tomaron ventaja de una estructura simple musicalmente y métricamente, siendo ésta de gran ayuda
Newnotizie.it - Tokio Hotel, los fans viajamos gracias a ellos Tokio Hotel, los fans viajamos gracias a ellos
18:59:00100% alien_humanoidDiecisiete años. La voluntad de vivir, de hacer, de vivir.
La pasión por la música y una banda.
Ellos: Tokio Hotel.
El verlos es su sueño, pero nunca tener la oportunidad de pasar de su ciudad, parece imposible.
Convencer a los padres, tomar nota, organizar todo.
¿A cuántos fans jó venes de la banda alemana ha pasado por esto? Una gran cantidad. Yo incluida.
Pero sin darse cuenta (o casi), estás en un avión por primera vez en su vida, descubres nuevas ciudades, nuevas culturas y nuevas emociones.
SÃ, porque el ser no es sólo fans gritando en un concierto y conocer todo sobre sus Ãdolos.
Ser fans es hacer nuevos amigos, nuevas experiencias, pero, sobre todo, también viajar.
Nunca pensé que un dÃa serÃa capaz de ver las ciudades como ParÃs, Hamburgo, Madrid.
Pero, gracias a ellos, esto fue posible.
Aterrizar en un paÃs diferente cada vez, sabiendo que, en breve, verÃas las cosas que habÃas visto sólo a través de tarjetas postales.
Las personas que viven su vida normal como la tuya, pero en diferentes lugares e idiomas que deseas saber.
Tratar de no perderse ningún detalle,ser tan entusiasta.
Quieres ver y hacer tantas cosas como sea posible. Cosas que nunca se hace en tu ciudad.
Uno se detiene a fotografiar todo, incluso las cosas más triviales, pero que en ese momento no lo son.
Quieres capturar cada momento de ese viaje que siempre quisierás nunca olvidar!
Luego viene el dÃa del concierto, la noche que revivirás de nuevo a Tokio Hotel en la ciudad ... y las emociones que aquà no pasan por alto nada.
Siempre las alegrÃas son experiencias diferentes, únicas.
El deseo de hacer más y más. Junto a ellos y junto con tus amigos.
Y estos "otros tiempos" tu sabes que vendrán ... tarde o temprano!
Federica Buttarelli
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